Nuestra ilusión es aportar un granito de arena para el cambio que queremos ver en el mundo.
“Son cosas chiquitas. No acaban con la pobreza, no nos sacan del subdesarrollo (…)
Pero quizás desencadenen la alegría de hacer y la traduzcan en actos. Y, al fin y al cabo, actuar sobre la realidad y cambiarla, aunque sea un poquito, es la única manera de probar que la realidad es transformable”.
-Eduardo Galeano
Y como creemos que podemos marcar un camino en el ámbito educativo, en este caso ligado al fútbol, apuntamos a consolidarnos como una organización social, activa, ágil, innovadora, que ofrezca respuestas sólidas a los desafíos que se le planteen a lxs jóvenes.
En función de ello, la Fundación el Futbolista se reconoce en las actividades que propone y en los objetivos que persigue. El fin es que la totalidad de la oferta educativa resulte significativa para lxs alumnxs, ya que ellxs son el punto de partida y de llegada de la tarea cotidiana. Es desde allí, que consideramos prioritario el reconocimiento de la voz del otro, el fortalecimiento en la capacidad de participación y construcción de la demanda.
“Para enseñarle latín a Juan, hay que saber latín, pero también hay que saber Juan”
– Proverbio Jesuita
Adquiere transcendencia pensar que se constituye como un ámbito de pertenencia y referencia de docentes y de alumnxs, que propuestas de educación formal y no formal se interrelacionan, adquieren visibilidad de igual manera, se perciben como un todo y se inscriben en una red desde la que encuentran su anclaje.
En definitiva, hablamos de biografías educativas que sirven de soporte a diferentes instancias de formación y prácticas laborales a lo largo de toda la vida.
Hablamos de la planificación de la enseñanza, pero también del aprendizaje, de las actividades, de las intervenciones, de nosotrxs y de lxs otrxs, imbricados en un sinfín de vínculos y relaciones, desde un marco que contemple conocimiento, respeto, confianza y contención.
“La igualdad no como horizonte, sino como punto de partida, implica sostener que ningún sujeto está imposibilitado ni inhabilitado, en el territorio común para ser par, para formar parte, para tener su parte.”
-Graciela Frigerio